Somos un coro de aficionados, nacido en 2002 por iniciativa de un grupo de madres y padres del Colegio Público La Paloma, actualmente constituido como Asociación Cultural. Nuestro repertorio incluye música religiosa, profana y folclórica desde la Edad Media hasta la actual (de la que constituye un notable ejemplo la composición que nos dedicó Manuel Dimbwadyo para El Silbo del Dale de Miguel Hernández y que estrenamos en mayo de 2013). Durante años realizamos nuestros ensayos en los IES San Isidro y Emilio Castelar de Madrid, actualmente en la capilla de La Ascensión del Señor (C/Zaida 71, 28019) los lunes por la tarde. Hemos ofrecido conciertos didácticos, navideños y de clausura de curso y también hemos participado en muchas actividades junto con otros coros.

Desde 2005, por ejemplo, en las fiestas de mayo de La Olmeda de Jadraque, en el proyecto “El arte aplicado a mejorar la calidad de vida del enfermo” del hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid; hemos colaborado con el coro Stella Splendens dirigido por el compositor Enrique Igoa y con la coral californiana Village Voices Westlake Village, así como en la pieza de video-arte “Tulipán digital experimental” del diseñador sonoro Carlos Hurtado Pastor; en la celebración de “La noche de los libros” en la biblioteca pública Rafael Alberti y en las “Tardes musicales” del IES Beatriz Galindo.

Desde 2010, hemos cantado en el Primer Encuentro Coral de la Casa de la Cultura de Tres Cantos, en conciertos benéficos (en favor de los enfermos de esclerosis múltiple de Leganés y de los alojados en la Residencia de Mayores de Burguillos), navideños (en el CC Rigoberta Menchú y el IES Isabel la Católica), de clausura de curso (en el CEPA de Aluche, el mercado de La Cebada, el CAMF de Leganés y en algunas iglesias compartiendo música con otros coros). También participamos en la inauguración de la exposición “El cristal con que se mira” en la Casa Regional de Extremadura de Getafe.

En marzo de 2020 iniciamos un nuevo proyecto pedagógico (Con-cierto-Ritmo), que tuvimos que interrumpir en el mes de marzo por el confinamiento, pero un año después volvimos a cantar. Desde entonces hemos continuado realizando conciertos de otoño, navideños, de música para Pascua y de músicas del mundo.